Ese dicho: "Aunque la moña se vista de seda mona se queda", me parece cruel, pero también es muy real... ¿Quién no tiene en su vida o conoce a una de esas monas?
La obligación, la presión social y hasta la "apariencia" que obliga a parecer y dejar de ser. No es cuestión de frivolidad, es cuestión de buen gusto, humildad y hasta tener los pies sobre la tierra, saber lo que yo persona quiero para mi, y no lo que creo que quiero que los demás vean o crean que soy; eso me parece un calvario, el cambiar y en el mejor de los casos mejorar (No por los que más bien empeoran) es un objetivo penoso y algo humillante cuando se hace por "impresionar" a personas que al final del día, ni nos importan, ni les importamos.
¡La mujer en particular debe mejorar porque así lo quiere, porque su estima y amor propio se lo pide, no por un deseo antojadizo de parecer algo que no es, de otra manera sólo será flor de un día, que para mañana ya estará marchita!